Kayla Montgomery es una de las mejores corredoras de fondo de los Estados Unidos, a pesar de padecer esclerosis múltiple. Esta enfermedad afecta al sistema nervioso central provocando lesiones neurodegenerativas crónicas, siendo actualmente incurable aunque tratada de forma más o menos eficaz. Como podemos suponer, para Kayla cada carrera supone un auténtico desafío (hasta el punto de desfallecer en los brazos de su entrenador), y a pesar de ello la deportista mantiene su perseverancia para alcanzar el podio y convertirse en fuente de inspiración para todas aquellas personas que se sienten limitadas por la enfermedad. Todo un ejemplo de superación...