
Cada año, millones y millones de toneladas de desechos plásticos acaban esparcidos por mares y océanos poniendo en peligro la vida marina y, mucho peor, el medioambiente a nivel global. Del mismo modo, el rápido crecimiento de las zonas urbanas hace necesaria la fabricación de nuevas vías de comunicación entre las mismas, siendo tristemente la prosperidad humana un sinónimo de mayor contaminación. ¿Cómo disfrutar de un crecimiento sostenible? Pues por ejemplo, con las carreteras de plástico propuestas por VolkerWessels.