
En ocasiones, las personas verdaderamente amantes del deporte desafían todo tipo de reglas escritas y son protagonistas de vivencias realmente increíbles, de esas que te dejan con la boca abierta. Es la historia de Sindy Hooper, una atleta canadiense de 50 años con cáncer de páncreas que, en pleno tratamiento de quimioterapia tras una dura operación quirúrgica, ha conseguido terminar con éxito un Ironman. Sin duda alguna, todo un ejemplo de superación y una clara demostración de que, con ganas de vivir, todo es posible.