
Aunque suena a utopía en nuestra querida España, en países como Francia y más recientemente Italia ya es posible engrosar el salario mensual de un trabajador si éste acude a su lugar de trabajo montado sobre una bicicleta. En tierras galas, el Ministerio de Transporte francés anunció hace un año que incentivaría el uso de la bicicleta en los trayectos hacia el trabajo pagando 21 céntimos de euro por kilómetro recorrido. En Italia, en la localidad de Massarosa, los ciudadanos también ganarán más dinero si hacen uso de la bicicleta para acudir a sus correspondientes lugares de trabajo.